24-06-2024
“Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.”
Jeremías 29:11
Jeremías 29:11
Jeremías 29:11 es un versículo que ofrece una promesa de esperanza y propósito. Dios asegura que tiene planes para nosotros, planes de bienestar y no de calamidad, para darnos un futuro lleno de esperanza. Este versículo nos recuerda que, a pesar de las circunstancias, Dios tiene un propósito específico y bueno para cada uno de nosotros. No estamos aquí por casualidad; nuestra vida tiene un significado y un destino planeado por Dios.
En Efesios 2:10 se dice: “Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.” Aquí, Pablo nos enseña que somos obra de Dios, creados en Cristo Jesús para cumplir buenas obras que Dios preparó de antemano. Esto significa que Dios ya ha preparado un camino y un propósito para nosotros. Cada talento, habilidad y experiencia que tenemos es parte del diseño divino para que podamos cumplir nuestro propósito en la tierra.
Además, en Proverbios 19:21 se nos dice: “Muchos pensamientos hay en el corazón del hombre; mas el consejo de Jehová permanecerá.” A veces, podemos tener muchos planes y deseos, pero el propósito de Dios es el que se cumplirá. Esto nos llama a confiar en la sabiduría y el plan de Dios por encima de nuestros propios pensamientos. Su propósito para nosotros es perfecto y está lleno de su bondad y amor.
Conocer el propósito de Dios nos da esperanza y dirección. Su plan para nosotros es bueno y lleno de promesas. Al confiar en su sabiduría y seguir su guía, podemos vivir vidas llenas de significado y propósito, cumpliendo las obras que Él ha preparado para nosotros.