12-02-2024
“Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo.” Mateo 28:19-20 (NVI)
Mateo 28:19-20
El mandato de Jesús de llevar el evangelio a todas las naciones es claro y poderoso. En Mateo 28:19-20, conocido como la Gran Comisión, Jesús instruye a sus seguidores a ir y hacer discípulos de todas las naciones, bautizándolos y enseñándoles a obedecer sus mandamientos.
Evangelizar a las naciones no se trata simplemente de compartir palabras bonitas o convencer a otros de nuestras creencias. Es un llamado a llevar el mensaje transformador del evangelio a todos los rincones del mundo, con amor, humildad y compasión.
Nuestra responsabilidad como discípulos de Jesucristo es mostrar su amor y gracia a través de nuestras acciones y palabras, buscando siempre la salvación y el bienestar de quienes nos rodean, sin importar su origen étnico, cultural o socioeconómico.
Evangelizar a las naciones es una tarea monumental que requiere la guía y el poder del Espíritu Santo. Al aceptar este llamado, nos unimos a una historia sagrada de redención y reconciliación, donde cada vida transformada es un testimonio del poder de Dios para cambiar corazones y comunidades.
Que podamos comprometernos a llevar el evangelio a las naciones con valentía y determinación, confiando en la promesa de Jesús de que él estará con nosotros siempre. Que nuestro corazón arda con el deseo de ver a todas las personas conocer y seguir a Cristo, y que nuestras acciones reflejen su amor y verdad a medida que nos involucramos en esta misión divina. Oremos para que Dios nos capacite y nos dirija en este importante llamado, para su gloria y para la expansión de su reino en toda la tierra. Amén.