14-02-2025
”¡Gracias a Dios por su don inefable!”
2 Corintios 9:15
2 Corintios 9:15
La gratitud no solo transforma nuestro corazón, sino que también se convierte en un testimonio del trabajo de Dios en nuestras vidas. En 2 Corintios 9:15, Pablo expresa: “Gracias a Dios por su don inefable”. Este don de la salvación en Cristo es el mayor motivo para ser agradecidos, y nuestra gratitud se convierte en un testimonio de lo que Dios ha hecho en nosotros.
Cuando compartimos nuestra gratitud con otros, estamos proclamando las maravillas de Dios. La gratitud se convierte en un acto de adoración que edifica a los demás. En el Salmo 107:1, dice: “Alabad a Jehová, porque él es bueno; porque para siempre es su misericordia”. Nuestra gratitud hacia Dios se convierte en una declaración pública de Su bondad y fidelidad.
La gratitud también nos mueve a compartir las bendiciones de Dios con los demás. En 1 Pedro 4:10, se nos instruye a usar nuestros dones para servir a los demás, como buenos administradores de la gracia de Dios. Al dar gracias por lo que hemos recibido, nos motivamos a compartir esa generosidad con los demás, demostrando el amor de Dios en acción.
La gratitud es un testimonio poderoso de la obra de Dios en nuestras vidas. Al expresarla, no solo honramos a Dios, sino que también edificamos a los demás y mostramos el impacto de Su gracia en nuestro corazón.