22-05-2025
“Depositen en él toda ansiedad, porque él cuida de ustedes.”
1 Pedro 5:7
1 Pedro 5:7
La ansiedad se presenta como un peso invisible que agobia el alma. Pero la Palabra nos dice que podemos depositar toda esa carga en las manos de Dios. No algunas preocupaciones, sino toda ansiedad. Esta es una invitación a soltar lo que nos abruma, sabiendo que Él cuida de nosotros con amor eterno.
Dios no es indiferente a nuestras luchas internas. Él conoce los pensamientos que nos roban la paz y desea que aprendamos a confiar plenamente en Él. Cuando le entregamos nuestras ansiedades, no las estamos ignorando, sino poniéndolas en las manos del Único que tiene poder para obrar en medio de ellas.
El cuidado de Dios es real y constante. Su amor no tiene descanso ni vacaciones. Él vela por sus hijos día y noche (Salmo 121:4). En lugar de aferrarnos al control, soltar la ansiedad es un acto de humildad y fe. Es decirle a Dios: “Confío en Ti más que en mis circunstancias.”
Hoy puedes elegir confiar y descansar. No estás solo. Dios está atento a tus pensamientos, tus preocupaciones y tus temores. Su cuidado es perfecto. Echa tu ansiedad sobre Él y experimenta su fidelidad.