21-02-2025
”No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor”.
Romanos 12:19
Romanos 12:19
A menudo, creemos que perdonar significa olvidar el daño recibido, pero la Biblia nos enseña que el perdón no es negar la ofensa, sino confiar en la justicia de Dios. Romanos 12:19 dice: “No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios”. Esto significa que podemos soltar la carga del rencor y confiar en que Dios hará lo correcto.
Jesús no ignoró el pecado, pero sí ofreció perdón a quienes se arrepintieron. En Juan 8:11, cuando la mujer adúltera fue llevada ante Él, Jesús no la condenó, sino que le dijo: “Vete, y no peques más”. El perdón no borra la realidad del pecado, pero sí nos libera del deseo de venganza y nos permite vivir en paz.
El perdón nos ayuda a sanar, aunque el recuerdo de la herida permanezca. Isaías 41:10 nos recuerda que Dios es quien nos sostiene y nos fortalece. Cuando entregamos nuestras heridas a Dios, Él nos da la gracia para seguir adelante sin que el pasado nos controle.
Perdonar no significa olvidar, sino confiar en Dios. Cuando dejamos la justicia en Sus manos, podemos vivir en paz, libres del peso del rencor y llenos de Su amor.
